Nancy Gonzalez Coca / Bilbao / Noviembre 2007
La líder y principal luchadora de los derechos civiles de la comunidad hispana en Estados Unidos, Dolores Huertas, fue una de las invitadas especiales del festival Vivamerica, evento con el cual “Casa de América quiere difundir la vitalidad del pensamiento y la creación en Iberoamérica.” Ella compartió sus conocimientos, experiencia e inquietudes en materia de inmigración en una conversación sostenida con el periodista y escritor español Javier Valenzuela, junto con la participación de varios asistentes. Dolores, de 77 años, fue compañera de lucha del también líder sindical César Chávez, quienes -desde hace décadas- organizaron a los y las trabajadoras campesinas inmigrantes en Estados Unidos para que reclamaran sus derechos laborales. Huertas, ha sido arrestada 22 veces por sus actividades pacíficas en pro de la reivindicación de los derechos de la población inmigrante en los Estados Unidos.
Dolores Huertas mencionó que la lucha que mantienen en este momento, es la búsqueda de una ley de regularización de la población inmigrante indocumentada, ya que, si bien se trataba de una política mantenida por la administración estadounidense hasta hace algunos años, actualmente, el partido republicano utiliza el tema de la inmigración como arma con fines electorales. “Los republicanos usan el racismo para ganar las elecciones, su política es anti-étnica y anti-inmigrante” agregó Huertas.
El partido republicano inició esta política primero en California, al eliminar la acción afirmativa o de discriminación positiva, la cual busca establecer políticas de trato preferencial en el acceso a algunos bienes y servicios, así como en la distribución de ciertos recursos, por parte de grupos desfavorecidos o que históricamente hubieran sufrido discriminación a causa de injusticias sociales, con el objeto de mejorar su calidad de vida y compensarlos por los perjuicios o la discriminación de la que fueron víctimas en el pasado.
De igual manera, aumentaron las deportaciones y las expulsiones después de la manifestación latina de trabajadores del primero de mayo en 2006, acto conocido como “día sin inmigrantes”, donde la población de este sector no consumió, ni asistió al trabajo, ni a la escuela, como representación de la importancia que tienen en la sociedad y economía estadounidense.
También se está imponiendo una ley para impedir la educación bilingüe, y en ese sentido, “los programas de bilingüismo son contados y el resultado de esta política es que muchos latinos en la preparatoria no han podido terminar sus estudios y se encuentran fuera del sistema educativo”, concluyendo Dolores que, “los inmigrantes en Estados Unidos se encuentran en una situación muy grave. Las redadas siguen. Las fuerzas del orden llegan a media noche a las casas para sacar a la gente, para deportarla. En las iglesias y en las calles les piden papeles. Han arrestado a más de 300 personas en el último periodo. Se están separando familias enteras, los niños se están quedando solos sin protección en el territorio norteamericano”.
La líder hispana aseveró que “es una limpieza étnica la que quieren hacer” en este momento el gobierno estadounidense. “No quieren legalizar a los latinos por que van ha votar a los demócratas. Son doce millones de personas las que no tienen papeles en regla. Se podría decir que las razones que motivan al gobierno norteamericano para no legalizar a esta población son políticas.” Asimismo, las personas que están en la cárcel en este momento en su mayoría son latinos, negros y blancos pobres. “Estados unidos está en el camino del fascismo en este momento” afirmó Huertas, así como que, “de igual forma, los medios de comunicación en Estados Unidos están controlados por las corporaciones. Al estar controlados por estos grupos económicos, desinforma o no informan como es la situación de la inmigración en su territorio. Por tanto, la clave de la mala imagen que tiene los inmigrantes en este momento es debido en parte a las corporaciones.”
La inmigración se genera porque no existen fuentes de trabajo en los países emisores de población emigrante. Los tratados de libre comercio ocasionan que las empresas locales de estos países se destruyan y las corporaciones, en su mayoría estadounidenses, capten todo el capital, limitando la distribución de ese dinero en estos territorios.
En definitiva, Huertas dejó muy claro que “Latinoamérica tiene una póliza de colonización económica por parte de los Estados Unidos y los tratados de libre comercio terminan minando la economía de los países latinoamericanos. Por eso es necesario educar al público en general sobre los derechos del inmigrante y sobre las causas y consecuencias de estos flujos. Por ejemplo, los inmigrantes indocumentados contribuyen con 8 mil millones de dólares y 50 mil millones de dólares en impuestos locales y tazas en la economía estadounidense. Es así como Estados Unidos necesita de los inmigrantes para sostener su economía”.
En el contexto electoral actual estadounidense, Dolores Huertas apoya a la candidata demócrata Hillary Clinton “ya que ella ha intervenido a favor de los inmigrantes y se ha comprometido en firmar una ley para regularizar a los inmigrantes indocumentados”. Caso contrario al del también candidato presidencial demócrata Barack Obama, quien no ha apoyado las reivindicaciones de la población inmigrante. Huertas, resaltó que para cambiar la situación de la población inmigrante, ésta debe tomar responsabilidad de sus condiciones; haciendo huelgas, boicot, etc. “De esta manera fue que los patrones empezaron a formar convenios” indicó.
Finalmente, sobre la política de la Unión Europea con respecto a la inmigración, señaló que “tienen el mismo problema que en Estados Unidos. Todos estos países de Europa se han beneficiado de la gente de Latinoamérica. Ellos deben entender que la pobreza que existe en esos países fue por culpa de la explotación de los países europeos y ahora tienen que aceptar a los inmigrantes y ayudar a esos países ha que se desarrollen” .